El vicepresidente de Peñarol, Edgar Welker, dijo que “las exigencias” que pide el Banco de la República Oriental del Uruguay (BROU) para otorgar el préstamo de US$ 20 millones para la construcción del estadio “parecen exageradas” y “me da temor” por el futuro del club.
El dirigente expresó en Sport 890 que la decisión que tome la institución “no va a afectar solo a este consejo directivo, sino que a los próximos cinco consejos directivos del club”. Agregó que “esperaba que la resolución del banco fuese diferente” y no que pidiera de garantía los derechos de televisión y la venta de entradas.
Que Peñarol tenga que asegurarle un pago anual de US$ 2.300.000 durante 15 años “es exagerado” para Welker y manifestó que “no quiero un Independiente de Avellaneda con un estadio sin terminar y en la B”.
Welker reconoció que hace más de un año dejó de ser citado por Peñarol a las reuniones por el estadio debido a un distanciamiento con el presidente Juan Pedro Damiani. Sin embargo, dijo que el jueves habló con Damiani y que tiraron ideas para que el proyecto del estadio no se caiga: “Vamos a tener una reunión de consejo directivo para tirar ideas mejores; tal vez tengamos que ajustar el proyecto edilicio, bajar la cantidad de espectadores, veremos”.
El Observador