El vicepresidente de Peñarol, Edgar Welker, quedó muy molesto con la actitud del presidente de la institución, Juan Pedro Damiani, de no llamarlo el pasado domingo para invitarlo a su casa en un día decisivo en el que determinaron con otros allegados suyos la continuidad de Diego Alonso como técnico y la sanción a los tres futbolistas indisciplinados.
"La verdad es que no me siento respetado por Damiani. Lo digo como vicepresidente. Yo respeto y quiero que me respeten. Los protagonismos excesivos no le hacen bien a nadie y menos en Peñarol", dijo Welker consultado por El Observador.
A su vez, a la hora de hablar sobre una futura fórmula presidencial nuevamente con Damiani, el vicepresidente indicó que "no, no lo haría nuevamente".
El Observador